lunes, 22 de noviembre de 2010

Hay puentes que nunca se cruzan por temor a que se desmoronen mientras caminamos sobre ellos, porque los cimientos son frágiles e inseguros.
El otro día casi me mato atravesando el puente que me construiste pensado en nosotros. Sabes que? Ahora veo que no tenemos futuro y que mi mejor amiga tenia razón. No dudo de ti. Pero de ella? Ni aunque me paguen con lo que más espero del mundo. Así que, paso de estar pendiente de ti. Si quieres algo, avísame que voy a fumarme la ciudad.

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